Ni Walmart, ni Costco: llegará City Market

Ni Walmart, ni Costco: llegará City Market

Foto Ilustrativa City Market Nuevo León

 

El edificio donde se encuentra el restaurante “Pollo Feliz” era pequeño en 2005, por lo que se reubicó y cedió el espacio para la construcción de La Comercial Mexicana. El Pollo respetó la arquitectura urbana, mientras que la Mega, quedó en Bodegón y ya más tarde la administración en 2006, trabajó (luego de la presión de un colectivo ciudadano Basta Ya) para que la arquitectura se adecuara a la ciudad, sin embargo el gobierno únicamente pudo conseguir—porque los permisos ya estaban dados—que se construyeran las actuales dos fachadas que cubren parte del bodegón. Aunado a estos dos proyectos estaba otro que se construiría en donde por decenas de años el Motel La Siesta prestó servicio de hospedaje, luego fue derruido hace más de una década y los rumores se incendiaron, que sería construido ahí un Walmart, luego no; sería un Costco. Los rumores terminaron recientemente pues ahora se sabe que se construye un City Market, y acorde al gobierno local, la construcción estará apegada a los estándares arquitectónicos de San Miguel. 

 

City Market

 

Hace un par de meses, se colocaron láminas metálicas sobre salida a Celaya, casi al llegar al Puente El Pípila (antes Glorieta). Los trabajos inicialmente fueron de excavación. Ahora se conoce que el proyecto que ahí se construye es una tienda City Market. 

 

El director García indicó que el proyecto está autorizado casi de facto, y es que la zona, en el Plan de Desarrollo Urbano y Ordenamiento Territorial 2040 la zona ya está marcada como área comercial. Es decir “cualquier tienda podría instalarse ahí”. 

 

García concretó “quienes adquirieron el predio están construyendo una tienda City Market. Una tienda de la más alta gama de La Comer”. Agregó que además de la tienda, ésta contará con locales comerciales y estacionamiento. 

 

Sobre el tema arquitectónico, el director aseguró que la construcción que estará sobre 2.1 hectáreas, contará con una construcción de 9,125 metros cuadrados, y debería contar “es el requisito” con 86 cajones de estacionamiento, sin embargo ésta tendrá 274 espacios. 

 

Sobre las alturas, indicó que será de 10 metros “la máxima”, y que no se podrá ver el bodegón como ocurre con la Comer, pues “la fachada se cuidará, que haya materiales y arquitectura acorde a San Miguel de Allende”. Eso sí, aclaró que en el tema del techo nada se puede cambiar pues basta subirse a una azotea para ver el domo de lugares como el antiguo edificio de Ford, el antiguo cine Hermanos Aldama, entre otros espacios. 

 

Ampliación de Zona Centro

 

El director de Patrimonio y Centro Histórico, Francisco García, habló con Atención sobre el proyecto, aunque primero celebró que en febrero 2020 el ayuntamiento decidiera ampliar el radio de acción de la dirección. 

 

La propuesta de ampliación de la Zona (que previamente observaba Desarrollo Urbano) Centro, acorde a la administración local, tiene como objetivo lograr un proyecto de imagen integradora “para que locales y visitantes perciban la congruencia y armonía de estos lugares con la zona Centro, Zona de Monumentos, y área declarada Patrimonio de la Humanidad”.  

 

Para lograr la idea, entonces la zona Centro se amplió hacia las colonias Aurora, Valle del Maíz, Guadalupe, y San Antonio. Pero también en accesos de la ciudad, que abarcan Salida a Celaya, de Stirling Dickinson al Puente Deprimido; Salida a Querétaro, del Hotel Misión a la intersección con Libramiento Manuel Zavala y Paseo de los Conspiradores; finamente Cazada de la Estación, del Puente Guanajuato a Puente Bicentenario.

 

Se integrarán las alturas, la paleta de colores, el tipo de anuncios; dijo el director de Patrimonio—Francisco García. 

 

Entre tanto, la administración, cuando se hizo el cambio, aseguró que la acción buscaba “establecer el equilibrio coherente y armónico entre la actividad económica local, el paisaje y la imagen urbana, procurando evitar cualquier intención, uso, proyecto, o acción en cualquier área, predio, educación o instalación que degrade o deteriore la imagen urbana o distorsione la apreciación del patrimonio cultural, urbano y arquitectónico”. 

 

En 2019, el presupuesto para mantenimiento y preservación del Centro Histórico fue de ocho millones de pesos, así cuando se dio la ampliación a la zona, García indicó que los beneficios serían: pinta de fachadas, nueva colocación de nomenclatura (nombres de calles, señalética, etc.) y mejor imagen urbana. 

 

Sí fue claro en indicar que las personas que viven en las nuevas zonas, no necesariamente deberían ir al Instituto Nacional de Antropología e Historia para tramitar permisos, o que esa institución intervenga en las colonias; pero “sí se van a tratar con criterios parecidos a nivel local, para irlas integrando al Centro Histórico”, mencionó.