Ante el cambio de semáforo naranja a rojo en Guanajuato, a partir del 25 de diciembre, y el cierre de lugares como cantinas, bares, casinos, antros, y otros, en San Miguel ya estaban cerrados—paso adelante en medidas sanitarias—ahora queda determinar las adhesiones sanitarias para fin de año.
Luego del anuncio de cambio en el color, Atención habló con el presidente Luis Alberto Villarreal. Éste recordó que los lugares a cerrar lo han estado desde el primer momento en la ciudad, y que quienes decidieron cambiar de forma temporal y extraordinaria el giro a restaurante bar, se han sometido a los protocolos y reglas dictados por las autoridades. “No cambia nada. Nos hemos anticipado a esas medidas” asestó el presidente.
En una conversación con este medio, continuó “a pesar que a nivel federal o estatal han cambiado los colores—que no son sencillos de entender: hay semáforos naranja que parecen más rojos; y rojos que parecen hasta verdes—San Miguel se ha podido sostener aún con el creciente número de decesos y contagios; con índices percápita muy bajos a nivel nacional e internacional”.
Lo anterior, aseguró el presidente, es porque la conducta es clara y consistente, no se ha mentido a la gente. La pandemia, siguió, “ha sido terrible, devastadora, dolorosa, compleja. Hablar con la verdad y ser consistentes en la narrativa nos ha permitido estar como estamos; y nos va a permitir ponernos de pie y salir adelante”.
Para las fiestas de fin de año (con la prohibición de eventos masivos) con la autoridad de salud, está trabajando para marcar medidas extraordinarias. Por lo pronto el 31 de enero el primer cuadro de la ciudad cerrará al tránsito peatonal desde el mediodía, abriendo a las 2pm el 2 de enero. “Más que prohibir, es evitar concentraciones. En los mismos términos del día del Grito”. Finalmente, invitó a los locales a cuidarse mucho, y a los visitantes a respetar más a los sanmiguelenses y la ciudad.