Por Cathy Taylor
¿Dónde encaja el arte cuando nos enfrentamos a tantos problemas estructurales y sociales?
Fran Schiavo habla primero sobre el proceso creativo en sí. “El tiempo en el estudio siempre ha sido un descanso para aliviar el estrés para mí: mi mente se aquieta en una interacción no verbal con el cepillo y la antorcha”.
Fran trabaja en encáustica, un medio de cera de abejas y resina de damar. Ella aplica la cera derretida con pinceles y espátulas, mezclando pigmentos a medida que avanza el trabajo. La obra se construye en capas mezcladas con una antorcha.
“Gran parte de la magia proviene de la antorcha”, dice Fran. “Derrite las capas, revela destellos de lo que está debajo y crea un flujo de color que puede convertirse en una característica importante del trabajo terminado. A veces es impredecible, y ese es el atractivo para mí. Me lleva muy adentro del momento, involucrada en el proceso “.
Muchas de sus obras son piezas en miniatura (cuadradas de 6 pulgadas). Le encanta trabajar con este tamaño, ya que minimiza algunos de los problemas técnicos del medio. “La encáustica comienza a endurecerse tan pronto como sale de la paleta caliente. En las piezas pequeñas, es sencillo aplicar un trazo de pincel en toda la superficie”.
Más desafiante es trabajar en grande. Su último trabajo es una pieza de un metro por dos metros, “The Wall”. Es un paisaje abstracto que muestra el agua caer en cascada sobre un muro. Fue inspirado por (y el proceso de pintura fue una distracción) de la tormenta dañina que San Miguel experimentó en junio.
Fran señala que esta pieza, como todas sus obras, son lugares imaginados. “Siento que estoy entrando en el espacio que está tomando forma, y casi siempre es un espacio tranquilo”.
Eso la lleva de nuevo a la pregunta inicial sobre cómo “encaja” el arte.
Los clientes a menudo comentan que el trabajo también les tranquiliza. Y puede evocar algún espacio recordado con un significado especial. Una pieza se atribuyó de diversas formas, a una vista a orillas del lago en Michigan, de Nueva York y de Nueva Zelanda. Ese trabajo está ahora en una casa canadiense. “Me gusta pensar que sigue influyendo en la sensación del hogar, convirtiéndolo en un espacio más relajante y satisfactorio. Quizás a medida que pasamos más tiempo en nuestros hogares, esa es una pequeña forma en que el arte juega un papel positivo”.
Visite Magenta para ver el trabajo de Fran, de martes a sábado, de 11am-4pm.
Obtenga más información sobre los siete artistas de Magenta (Harry Ally, Steve Ellis, Pat Miller, Lola Picó, Fran Schiavo, Cathy Taylor y Fernando Pérez Vázquez) en www.MagentaGallery.com.