Un lugar para disfrutar la vida que pasa

Un lugar para disfrutar la vida que pasa

Por Jesús Aguado

 

En calle correo, frente a Corregidora está Cumpanio—cocina francoitaliana—un lugar en que el comensal llega, se pone cómodo y de lo demás, se encarga el talento.

 

Cum—compañero—panio (pan) con quien se comparte el pan, fue inicialmente la panadería, restaurante y bar, todos unidos por una beta aún visible en el piso. Luego se diversificó para crecer, pero también para mejorar.

 

Junto a una de las grandes ventanas hay una mesa pequeña con sillones cómodos, ahí la gerente de piso ofrecerá una carta de vinos, principalmente españoles, franceses, y locales los de Santísima Trinidad. Como entrada, podrá sugerir Tosta de calamares en pan sourdough, alioli y chorizo. 

 

Mientras se disfruta de la Tosta, maridada con vino (o con cerveza), se puede ver que un músico ofrece una pieza por la ventana; pasa una callejoneada, con un matrimonio feliz; pasan actores, futbolistas, pero lo más importante, la gente que hace, y preserva la cultura y tradición de San Miguel.

 

Mientras el comensal se pierde en esa vida cotidiana y una rica conversación, entonces podrá ordenar el plato principal: Costilla de res braseada en cerveza oscura, polenta cremosa, y espárragos al sartén.

 

Al final, la bebida de elección, la comida, la vista, el servicio y la experiencia habrán valido la pena.

 

Cerrado los miércoles. Abierto el resto de la semana, de 9am-9pm. Correo