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Con un retraso de 21 días fue entregado el Paso Deprimido El Pípila—el 1 de diciembre—hoy luego de seis días las obras que se indicaron “son accesorias”, no han concluido. Por otro lado, los semáforos dan paso únicamente por 40 segundos, quejosos consideran que debe ser más tiempo. 

La “mega obra” de 326 millones fue concluida por la SICOM (Secretaría de Infraestructura Conectividad y Movilidad) cumplió su compromiso, que era con el paso, indicó Antonio Soria—director de Obra Pública e Infraestructura en la ciudad. 

Y es que actualmente, sin fecha concreta para conclusión, se siguen construyendo accesos a comercios, banquetas, y hasta una caseta, entre otras obras que de día, y de noche causan molestia a conductores. 

La construcción que se en el lado sur del paso superior, es una caseta para “control y administración de energía para el cárcamo de bombeo. Tiene espacio para controles eléctricos de la operación automática; tiene también un generador para caso de emergencia. 

Está incluido en el proyecto. Hubo complementos a solicitud de SAPASMA—monitoreo remoto, actualizaciones, para el funcionamiento de las bombas. La caseta tiene dos espacios: uno para la planta, otro para tablero de control. Estará aplanado, pintado, cornisas de cantera. Las puertas y ventanas son rejillas para ventilación cruzada” indicó Soria. Remató “el proyecto de puente es para que no reciba agua de lluvia de otros lugares. Si la hubiera por algún taponamiento, sería función de la entrada en funcionamiento de uno, dos o tres de las bombas”. 

Agregó que el trabajo de banquetas que iría del paso deprimido a Frailes, podría comenzar en unas semanas—sin fecha definida. 

Sobre el tema de semáforos: la sincronización, y mayores detalles de funcionamiento, fueron solicitados a la Comunicación Social de la administración pública desde el viernes, sin embargo la respuesta es que “ya se solicitaron a Samuel Mercadillo, responsable de movilidad. Se enviarían en cuanto los tengan.