Mi día comenzó en el restaurante “Flor de Jamaica” que se encuentra ubicado en los Frailes, es un almuerzo especial ya que puedes disfrutar de una terraza en un entorno donde todo está verde, elegante y con una atmósfera muy tranquila. Estuve ahí disfrutando un rato de la buena energía que circulaba en el lugar.
Estaba muy cerca de la presa, así que decidí ir ahí con un par de amigos, dimos muchas vueltas y nos encontramos con muchas construcciones antiguas, y otras derrumbadas que le daban un plus a la vista. Tuvimos la fortuna de primero escuchar pasar al tren, y después verlo.
Habíamos escuchado que en Jalpa (un rancho a 5 minutos a las afueras de la ciudad) había un río en donde corría agua limpia. El día estaba soleado y pintaba ser un buen mini-viaje, así que decidimos ir.
Llegamos a Jalpa y nos encontramos con un puesto de gorditas que se veían riquísimas desde lejos. Y si, realmente eran buenas. Uno de mis amigos ya había ido, entonces él nos fue guiando llegando al rancho. Aunque es muy sencillo llegar por qué el lugar no es grande. El río no tenía tanta agua, no se si así es siempre o regularmente tiene más. Pero está super agusto para pasar el rato y disfrutar un poco de la naturaleza.
Decidimos regresar a cenar algo ya para irnos cada quien. Unos tenían ganas de pizza y otras de alitas, así que decidí llevarlos a Pizzalitas que está en Pirul en Peña de la Cruz.
Cómo volvimos a semáforo naranja, ya todo cierra temprano y no queda más que hacer, así que nos despedimos y cada quien partió para su casa.